Crimen perfecto

Trama
Crimen perfecto, estrenada en 1954, es una película británica-estadounidense de suspense criminal dirigida por Alfred Hitchcock que se centra en la intrincada red de chantaje y engaño. La película tiene lugar en Londres y está protagonizada por Ray Milland, Grace Kelly y Robert Cummings. Mark Halliday (Robert Cummings) es amigo del rico matrimonio formado por Mark y Margot Wendice (Ray Milland y Grace Kelly). La presencia de Mark en Londres desencadena una serie de acontecimientos, ya que sin saberlo pone en marcha una cadena de chantajes que conducirá a un clímax emocionante e intenso. Sin embargo, la presencia de Mark en Londres no es mera coincidencia: él y Margot aún conservan una conexión romántica de sus días universitarios. Margot, cuya relación con su marido se ha vuelto rancia y distante, desarrolla una obsesión por Robert (Maximilian Schell), un joven y carismático instructor de esgrima alemán. La situación se agrava cuando Robert empieza a chantajear a Mark, amenazándole con revelar su aventura al marido de Margot a menos que se le entregue una cantidad importante de dinero con regularidad. Mientras tanto, el matrimonio de Mark y Margot sigue deteriorándose. Los sentimientos de Margot por Robert siguen intensificándose, y Mark se da cuenta de su estado emocional. Al darse cuenta de que su matrimonio está a punto de fracasar, Mark busca la manera de salvar su relación con su esposa. Idea un plan con la ayuda de un amigo, un antiguo detective de Scotland Yard llamado Swann (Anthony Dawson), que ahora es detective privado. Las intenciones de Swann son inicialmente beneficiarse económicamente, pero en última instancia, desempeña un papel fundamental en la orquestación de los acontecimientos para ayudar finalmente a Margot. La noche de una cena en casa de los Wendice, la situación llega a un punto crítico cuando Margot es atacada por un intruso en su dormitorio. Mark, en un intento de asesinar a Margot y hacer que parezca un robo que salió mal, tira al intruso, que resulta ser Swann, sobre un abrecartas que Margot tiene en la mano. Parece que Margot se ha defendido del intruso y lo ha matado. Sin embargo, Margot, que se ha dado cuenta de la verdad que se esconde tras el plan de su marido, sigue el juego con astucia y manipula la situación en su beneficio. Los acontecimientos posteriores se convierten en una maraña de engaños a medida que las autoridades comienzan a investigar el asesinato. La presencia de Robert en la escena del crimen y el hecho de que saliera ganando con el asesinato, dado que Mark había acordado darle más dinero para mantener en secreto su aventura con Margot, suscitan interrogantes sobre su culpabilidad. A medida que avanza la investigación, las tensiones alcanzan un punto de ebullición. Robert se ve cada vez más enredado en la intriga a medida que Margot explota hábilmente la situación en su propio beneficio. Utiliza la implicación de Robert y el conocimiento que ha adquirido sobre las intenciones de su marido para crear una brecha entre su marido y Robert, alejando efectivamente a Mark. Al mismo tiempo, Mark sigue conspirando contra Margot y Robert, pero, en última instancia, su plan para incriminar a su esposa por el asesinato se vuelve en su contra y queda atrapado en su propia trampa. Al final, se hace justicia, y Mark, que ha sido declarado culpable del intento de asesinato, es castigado por su delito. Mientras tanto, Margot ha conseguido liberarse de la compleja red de chantaje y engaño, y finalmente surge más fuerte e independiente, tras liberarse de las limitaciones de su matrimonio fallido. A pesar de los intrincados giros y vueltas de la trama, Crimen perfecto se mantiene fiel a su título. En el final de la película, el título 'Crimen perfecto' se convierte en un símbolo del triunfo final de Margot, que toma el control de su destino y rechaza la vida en la que estaba atrapada con su marido, ahora convicto.
Reseñas
Recomendaciones
