Green Room

Green Room

Trama

En el tenso y trepidante thriller Green Room, el guionista y director Jeremy Saulnier teje una apasionante historia de supervivencia, identidad y las difusas líneas entre el bien y el mal. La película se centra en una banda de punk rock, The Ain't Rights, que se topa con un escenario oscuro y siniestro en un remoto bar de skinheads en el noroeste del Pacífico. La banda, formada por Pat, el cantante de Amit Chaudhry, el batería Joe, el bajista Rick, el guitarrista Tiger y el recién llegado Amish, ha estado de gira por todo el país, tocando ante pequeñas multitudes y luchando para llegar a fin de mes. Es una existencia agotadora, pero se ven impulsados por su pasión por la música y un sentido de rebeldía contra la corriente principal. Después de un espectáculo particularmente poco inspirador, aceptan un concierto en el bar local Clearview, ubicado en el bosque. El bar es un centro para la comunidad local de skinheads, y en cuanto la banda sube al escenario, se hace evidente que su presencia no es exactamente bienvenida. La multitud es hostil, y la banda se encuentra con una mezcla de abucheos, insultos e incluso amenazas. A medida que avanza la noche, la tensión aumenta y la banda ofrece una actuación desafiante y estridente. Justo cuando están a punto de terminar su set, un brutal acto de violencia estalla fuera del escenario. Un cliente afroamericano es brutalmente golpeado por un grupo de skinheads, y la banda queda atrapada en el fuego cruzado. En el caos que sigue, la banda es coaccionada para ayudar al gerente del bar, Darcy Banker, a limpiar las secuelas del ataque. Se hace evidente que Darcy no es solo un simple dueño de un bar, sino un individuo calculador y despiadado que no se detendrá ante nada para proteger sus intereses. Cuando los miembros de la banda intentan escapar, se encuentran atrapados en el bar, sin una salida clara. Darcy, junto con su mano derecha, Guy Deffell, y un grupo de skinheads fuertemente armados, no se detendrán ante nada para silenciarlos y encubrir el crimen. La banda debe usar todo su ingenio e ingenio para sobrevivir a la noche y salir con vida. Las actuaciones en Green Room son crudas e intensas, con una destacada actuación de Anton Yelchin como Pat, el cantante principal de la banda. Yelchin aporta vulnerabilidad e intensidad al papel, transmitiendo la desesperación y el miedo que se apoderan de la banda mientras lucha por sobrevivir. La cinematografía de la película es austera e implacable, capturando la atmósfera arenosa y deteriorada del bar de skinheads y los bosques aislados que lo rodean. La tensión aumenta lentamente, a medida que la banda se vuelve cada vez más consciente del peligro en el que se encuentra y de la violencia que acecha justo debajo de la superficie. Uno de los aspectos más llamativos de Green Room es su exploración matizada de los grupos de odio y sus ideologías. Si bien la representación de la película de los skinheads es implacable y despiadada, también reconoce las complejidades del problema y las zonas a menudo grises que existen dentro de los grupos extremistas. Darcy, interpretado con escalofriante intensidad por Patrick Stewart, es un personaje magistralmente dibujado que encarna las contradicciones de los grupos de odio. En la superficie, es un individuo carismático y persuasivo, pero a medida que avanza la película, se hace evidente que está impulsado por una mezcla retorcida de racismo, oportunismo y narcisismo. Guy, interpretado por Macon Blair, es una figura más enigmática, cuyas motivaciones son más turbias y complejas. Es un producto de la misma cultura de grupos de odio que Darcy, pero su lealtad se pone a prueba cuando lo que está en juego se vuelve cada vez más alto. Las interacciones de la banda con los skinheads son tensas e impredecibles, a menudo virando hacia el humor negro y la ironía. Hay una sensación de claustrofobia y desesperación que aumenta a lo largo de la película, a medida que los miembros de la banda se dan cuenta de que están atrapados en una pesadilla de la que es posible que no despierten. En su acto final, Green Room se convierte en una historia de supervivencia desgarradora e intensa, mientras la banda lucha por sus vidas contra probabilidades aparentemente insuperables. El clímax de la película es visceral y estimulante, y plantea preguntas sobre la naturaleza de la violencia, el odio y los prejuicios. Al final, Green Room emerge como un thriller apasionante y oportuno que desafía a su audiencia a confrontar los aspectos más oscuros de la naturaleza humana. Es una película que dejará a los espectadores al borde de sus asientos, cuestionando la facilidad con la que puede estallar la violencia y la dificultad de escapar de sus consecuencias.

Green Room screenshot 1
Green Room screenshot 2
Green Room screenshot 3

Reseñas