Obsesión

Obsesión (1947) es un thriller psicológico dirigido por Fritz Lang, mentor de Martin Scorsese. La película narra la historia de Robert Winesocki (Cary Grant), un exitoso y adinerado empresario de Nueva Orleans que se obsesiona con una joven llamada Myrna Bainer (Linda Darnell) después de que ella capta su atención en una reunión social. La obsesión de Robert con Myrna surge de su asombroso parecido con su difunta esposa, Charlotte. A medida que se adentra en la vida de Myrna, Robert empieza a ver paralelismos entre sus circunstancias y se convence de que comparten una profunda conexión emocional. A pesar de saber que Myrna no es su esposa, Robert se encuentra incapaz de resistir su atracción hacia ella. A medida que la obsesión de Robert crece, comienza a consumirlo, afectando sus relaciones con quienes lo rodean. Su socio, Kirk Edmonds (Steve Hayes), se preocupa por el comportamiento errático de Robert y le advierte sobre los peligros de involucrarse demasiado con Myrna. Mientras tanto, Myrna desconoce las verdaderas intenciones de Robert y ve su conexión como una oportunidad romántica. A medida que la historia se desarrolla, la obsesión de Robert escala hacia una fijación oscura y violenta que pone en riesgo tanto su vida como la de Myrna. La película se dirige hacia una dramática confrontación entre Robert y Myrna, obligándolo a enfrentar la realidad de sus acciones y el daño que ha causado. Obsesión explora temas como el duelo, la culpa y las delgadas líneas entre el amor y la obsesión. Cary Grant ofrece una actuación matizada como el atormentado Robert Winesocki, aportando profundidad y complejidad a las luchas del personaje. La cinematografía de la película es notable por su uso de alto contraste e iluminación sombría, lo que añade una sensación de tensión y premonición que impregna la narrativa. En última instancia, Obsesión sirve como un cuento con moraleja sobre los peligros de permitir que las emociones consuman a una persona. La conclusión de la película es a la vez inquietante y provocadora, dejando a la audiencia reflexionar sobre las consecuencias de las acciones de Robert y la verdadera naturaleza de su obsesión.