La Máquina del Tiempo

En el año 1895, el excéntrico científico H.G. Wells, también conocido como George, se propone demostrar sus teorías sobre los viajes en el tiempo construyendo una máquina del tiempo en su laboratorio. Con la ayuda del hijo de su ama de llaves, Philby, George se embarca en un viaje a través de las épocas, dejando atrás a su amigo y confidente, David Filmer. Al viajar a través del tiempo, George se encuentra en el año 802.701, donde descubre que la humanidad ha evolucionado en dos especies distintas: los Eloi y los Morlocks. Los Eloi son criaturas pacíficas y gentiles que viven en la superficie, mientras que los Morlocks habitan bajo tierra, trabajando arduamente en túneles y cavernas oscuras. Al principio, George es bienvenido como un héroe por los Eloi, quienes están fascinados por su conocimiento del pasado. Sin embargo, pronto se da cuenta de que el mundo de los Eloi está construido sobre una base frágil, sin comprensión de la ciencia o la tecnología. Los Morlocks, por otro lado, poseen habilidades avanzadas de ingeniería y controlan la infraestructura subyacente. Mientras George explora este extraño mundo nuevo, se preocupa cada vez más por el destino de la humanidad. Se entera de que los Morlocks se aprovechan de los Eloi, usándolos como alimento para sustentar su propia existencia. Horrorizado por este descubrimiento, George se propone encontrar el camino de regreso a su propio tiempo, decidido a advertir a la humanidad sobre su inminente perdición. En el camino, George encuentra varios obstáculos y peligros, incluido un ataque de los Morlocks que lo deja herido y a la deriva en el desierto. También descubre que los Eloi no son tan inocentes como parecen, y algunos de ellos buscan secretamente poder y control. Al final, el viaje de George sirve como una advertencia sobre los peligros del progreso desenfrenado y la importancia de comprender nuestro propio lugar dentro del gran tapiz de la historia humana.