Valor de Ley

Trama
El año es 1878, y el Oeste americano es una tierra dura e implacable. Las personas que habitan este mundo implacable son material de leyenda, rudos y turbulentos, viviendo de su ingenio y sus armas. Es en esta tierra que una joven notable, Mattie Ross, se encuentra en el centro de una historia que sería recordada por generaciones. Tras el brutal asesinato de su padre, Frank Ross, por el infame Tom Chaney, Mattie se propone llevar al asesino ante la justicia. Intrépida por su edad y los peligros que le esperan, Mattie está decidida a demostrarse a sí misma y al mundo que es capaz de asumir los desafíos más difíciles. Con una resolución de acero y una gran determinación, Mattie emprende un peligroso viaje para capturar a Tom Chaney y llevarlo a juicio. Entra en escena el U.S. Marshal Reuben J. "Rooster" Cogburn, un hombre con una reputación tan dura como la propia tierra. Cogburn es un asesino con 'valor de ley', un hombre que se ha enfrentado a innumerables forajidos y ha vivido para contarlo. Es un U.S. Marshal manco que se ha ganado una reputación como pistolero con una inclinación por la justicia. Cuando Mattie se propone contratar a un U.S. Marshal para que la ayude a capturar a Chaney, se decide por Cogburn como su hombre. Cogburn es un héroe reacio, un hombre que no sufre a los tontos de buena gana y no está por encima de doblar las reglas para hacer el trabajo. A pesar de su duro exterior, sin embargo, Cogburn tiene un punto débil por Mattie, una joven que le recuerda a su propia sobrina. Mientras emprenden su viaje, Cogburn asume la tarea de proteger a Mattie, sabiendo que su determinación de capturar a Chaney podría matarla. Mientras se dirigen al Territorio Indio, Mattie y Cogburn se unen a LaBoeuf, un Ranger de Texas que también persigue a Chaney. Pero los motivos de LaBoeuf distan mucho de ser puros, y pronto queda claro que tiene sus propias razones para querer capturar a Chaney. Mientras recorren el traicionero paisaje del territorio nativo americano, las apuestas son cada vez más altas. Son perseguidos por una despiadada banda de forajidos, incluidos los cómplices de Chaney, que no se detendrán ante nada para evitar que Chaney se enfrente a la justicia. A medida que se adentran en el corazón de la tierra, Mattie y Cogburn desarrollan un vínculo que va más allá de la mera cliente y el U.S. Marshal. Cogburn se convierte en un mentor, brusco pero cariñoso, para Mattie, enseñándole las costumbres del Oeste y ayudándola a crecer frente a un peligro abrumador. Mientras tanto, LaBoeuf se vuelve cada vez más desconfiado, sabiendo que Cogburn no va a dejar que Mattie salga de su vista una vez que capturen a Chaney. A lo largo de su viaje, el trío se enfrenta a numerosos obstáculos y desafíos. Están asediados por todos lados por el peligro, desde el terreno accidentado del Territorio Indio hasta los despiadados forajidos que les pisan los talones. Pero Mattie y Cogburn son una fuerza imparable, impulsados por su determinación de llevar a Chaney ante la justicia y limpiar el nombre de la familia de Mattie. Al final, todo se reduce a un enfrentamiento entre Mattie, Cogburn y la banda de Chaney. El destino de Chaney está en juego, así como el futuro de Mattie y Cogburn. La acción se desarrolla en una serie de confrontaciones tensas y llenas de suspense, mientras Mattie y Cogburn se enfrentan a sus adversarios en un intento de salir victoriosos. Al final, se hace justicia y Chaney encuentra a su creador. Mattie y Cogburn regresan a casa, su vínculo más fuerte que nunca, pero su relación cambia para siempre por los acontecimientos de su épico viaje por el salvaje Oeste. Mientras cabalgan hacia la puesta de sol, está claro que Mattie ha encontrado algo que nunca supo que estaba buscando: un sentido de propósito, un sentido de pertenencia y un verdadero amigo en el Marshal Cogburn.
Reseñas
Cora
Matt Damon let the bullets fly a little at the end... A rare Western told through a female perspective, with a truly outstanding performance from the young actress. Unlike some of the Coen brothers' other films, the story unfolds at a deliberate pace, accompanied by beautiful music, though it feels like it lacks a certain depth. I particularly loved the vast Western prairie and the starlit night at the film's end. ★★★★
Sophie
Still deeply moved after rewatching, such a film brimming with sentimentality. Especially the added beginning and ending compared to the original, it's like an old man narrating a legendary tale under the dim glow of lamplight. The characters in the story have aged and passed away, much like those old lawmen eking out a living in the circus. This is a movie dedicated to the bygone era of Westerns and the lost innocence of childhood. The soundtrack is fantastic, with the music and cinematography perfectly complementing the nostalgic atmosphere.
Anthony
When I charged alone into the blizzard of revenge, I bid farewell to innocence. When he relieved himself of that burning burden, he aged in an instant. The wicked flee when no one pursues, and yet fate and consequence entwine in unpredictable cycles. We three never met again, but our lives remained frozen in that chase of a quarter-century past. As I cut down the hanging corpse, wading into the rapid current, I looked back at the unburied villain, bidding farewell to the fallen steed left to rot in the wilderness. The earth was silent, devoid of thunder, only stillness remained.
Hazel
The Coen brothers are quintessentially American, consistently embodying the rugged spirit of pioneers from a bygone era, their pursuit of freedom, unwavering faith, and relentless determination. With sweeping prairies, deep, rugged mountains, and unfathomable valleys, they imbue their films with a yearning for and observation of this vibrant land and the people who inhabit it. The film's score is exceptional.
Waylon
Following in the footsteps of "No Country for Old Men," this film evokes a sense of nostalgia. A hero roams the wilderness, destined to grow old in the saddle. Guns are used for communication, for proof, and to settle scores in matters of justice, humanity, and the order of giving and taking. There's camaraderie between people, a bond between humans and their horses. The narrative unfolds slowly, deliberately avoiding a conventional climax. However, the old hero's desperate, nighttime ride, man and horse collapsing together in the wilderness, holding the girl close, kneeling and uttering, "I'm old," that's the climax, that's the heart of it.
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