El Secreto de Sus Ojos

En 1997, los aprendices del FBI Jess Cobb (Chastain), Claire Benoit (Giamatti) y Martin Morales (Rivera) forman un vínculo inquebrantable como parte del equipo liderado por el fiscal de distrito Ray Kasten (Norton). Los cuatro trabajan juntos para resolver el asesinato de una niña de 13 años, la trágica pérdida de Jessie y la brutal violación y asesinato de la niña. El crimen deja una marca imborrable en los investigadores. Con el paso de los años, a medida que el equipo del FBI se disolvió y Ray Kasten (Norton) se convirtió en fiscal de distrito en Chicago, el vínculo entre Jess, Martin y Claire sigue siendo fuerte, se reúnen regularmente a cenar y continúan hablando de su época como socios del FBI. A medida que pasan los años, la vida avanza y los investigadores siguen adelante con sus respectivas vidas. Ray Kasten se ha casado y tiene dos hijos con su esposa Kate. A pesar del éxito que ha tenido tanto en su carrera como en su vida personal, la trágica pérdida de su hija Jessie todavía lo atormenta. Jess y Martin, por otro lado, continúan sirviendo al FBI, pero no son socios. Jess ahora trabaja como parte de la unidad de análisis de comportamiento de élite con la sede del FBI en Quantico, mientras que Martin se ha mudado a la división de Nueva York del FBI. Mientras tanto, otro caso se desarrolla en 2015, cuando Martin ve un noticiero sobre una niña que fue brutalmente asesinada. Mientras observa las imágenes de la escena del crimen, los rostros, la ropa y los detalles, algo le llama la atención. Inmediatamente se pone en contacto con Jess y Claire para llamar su atención sobre las similitudes del crimen con el asesinato de Jessie. Rápidamente se dan cuenta de que la persona que cometió el asesinato original y la persona que cometió este nuevo delito son la misma. El trío se reúne y decide reabrir el caso de hace 13 años después de darse cuenta de que han estado lidiando con el mismo perpetrador todo el tiempo. Como resultado, Ray, que todavía está luchando para aceptar la pérdida de su hija, une fuerzas con el trío una vez más para resolver el caso. A medida que se desarrolla la investigación, queda claro que el perpetrador ha sido un fantasma en el sistema, siempre escondido a plena vista. El trío tiene la tarea de reconstruir los eventos de los años 90 para desentrañar la verdad detrás del asesinato de Jessie y el de la niña de 13 años cuya identidad no ha sido revelada. A medida que avanzan en el caso, enfrentan algunos desafíos, como tener que trabajar con una generación diferente de oficiales, un equipo de investigadores que no es tan familiar y hábil como lo eran cuando cerraron el primer caso de Jessie. Tienen que ser extremadamente cautelosos a medida que se acercan a la resolución del caso y a la exposición del perpetrador que ha podido permanecer prófugo todos estos años. Con el tiempo, finalmente tienen pruebas suficientes y, con el apoyo de sus colegas y el nuevo fiscal de distrito, arrestan al perpetrador. Sin embargo, al arrestar al asesino, se dan cuenta de que el asesino no es quien creían que era. La verdad sobre el caso original se les revela y se sienten culpables por los años de dolor y sufrimiento que causaron a la familia de la niña que arrestaron injustamente. Luego tienen que enmendar y encontrar justicia no solo para la familia sino también para ellos mismos. La investigación conduce a una conclusión emocionante cuando el trío cierra el caso de 20 años, trayendo finalmente justicia a las víctimas y sus familias.