Solaris

Solaris

Trama

Basada en la novela original de 1968 del autor polaco Stanislaw Lem, la película Solaris de 1972 de Andrei Tarkovsky es una exploración profundamente contemplativa y filosófica de la conciencia humana, el amor y la naturaleza de la realidad. La película sigue al Dr. Kris Kelvin (interpretado por Oleg Strizhenov en la versión original rusa y Georgi Taratorkin en la versión doblada al inglés), un psicólogo que ha estado experimentando sueños vívidos e inquietantes. El estado mental del Dr. Kelvin se ha estado deteriorando desde que ocurrió un fenómeno misterioso e inexplicado en la estación de investigación Solaris, que orbita la superficie de un planeta distante conocido por sus extrañas y enigmáticas propiedades. La misión principal de la estación es investigar la superficie y comprender las extrañas firmas de energía del planeta Solaris. Mientras Kelvin se prepara para partir hacia la estación espacial, su psiquiatra le aconseja que considere la posibilidad de una crisis psicológica debido a sus pesadillas. Sin embargo, Kelvin se muestra escéptico y siente que sus sueños están genuinamente conectados con el misterioso planeta Solaris. Al llegar a la estación espacial Solaris, Kelvin conoce al equipo de investigación, incluido su viejo amigo y colega el Dr. Sartorius, quien se ha obsesionado cada vez más con el fenómeno Solaris. El comportamiento del equipo se ha vuelto errático y están luchando por mantener su equilibrio mental frente a los inexplicables eventos que se desarrollan ante sus ojos. La llegada de Kelvin es recibida con una mezcla de curiosidad y hostilidad, y se hace evidente que el equipo está al borde de un colapso colectivo. En el corazón de la angustia de Kelvin y de todo el equipo de investigación se encuentra el fenómeno de los "huéspedes" de Solaris. Se dice que el planeta es capaz de crear réplicas sintientes y humanoides de humanos que han estado fallecidos durante un tiempo considerable. Estas creaciones aparecen a la tripulación en varios escenarios de toda la estación, manifestando los miedos más oscuros o los recuerdos más profundos de cada individuo. A medida que Kelvin profundiza en el misterio de los huéspedes de Solaris, comienza a experimentar visiones y conversaciones extrañas, que lo llevan a cuestionar sus propios recuerdos y la realidad del mundo que lo rodea. Kelvin descubre que una mujer misteriosa, conocida como Hari (interpretada por Natalya Bondarchuk), ha aparecido durante su sueño, manifestando la presencia física de alguien a quien amó profundamente en el pasado, la esposa que perdió trágicamente en un accidente por ahogamiento cuando Kelvin era solo un niño. Hari es una creación de Solaris, pero se siente tan real como lo había sido su esposa real. Kelvin se apega profundamente a esta creación artificial, y su presencia despierta una sensación de anhelo y nostalgia que reabre recuerdos que pensó que había olvidado hace mucho tiempo. Kelvin lucha por diferenciar entre la realidad y el mundo artificial que está experimentando a través de los huéspedes de Solaris y, específicamente, Hari. La película plantea preguntas sobre la fiabilidad de la percepción humana y las líneas borrosas entre la conciencia, el subconsciente y los estímulos externos. A medida que Kelvin profundiza en la verdad detrás de la creación de Solaris, se enfrenta a una crisis existencial que cuestiona la naturaleza del amor, la condición humana y el propósito de la vida. A lo largo de la película, Andrei Tarkovsky emplea su combinación única de elementos visuales y metafísicos, creando una atmósfera hipnótica e inquietante. La película se prolonga entre una sensación de introspección, autodescubrimiento y una crítica filosófica de la naturaleza humana. Al final, el Dr. Kelvin elige regresar a la Tierra, pero no sin antes confrontar el misterio fundamental en el corazón del fenómeno Solaris: la esquiva verdad sobre el origen de las criaturas artificiales y lo que significa amar y ser humano. La ambigüedad de la película ha llevado a múltiples interpretaciones, cada una de ellas una respuesta válida a la indagación existencial de la película. Algunos interpretan la historia como un comentario sobre la naturaleza de la conexión humana, mientras que otros la ven como una exploración de la fragilidad de la conciencia humana. Solaris ofrece una profunda meditación sobre lo que significa ser humano y plantea preguntas fundamentales sobre la naturaleza de la realidad, la existencia y el amor de una manera que sigue resonando en el público hasta el día de hoy.

Solaris screenshot 1
Solaris screenshot 2
Solaris screenshot 3

Reseñas