La Alegre Casada

La Alegre Casada, estrenada en 1966, es una comedia romántica satírica dirigida por George Sidney. La película sigue la vida de Jean Harlow, una aclamada autora conocida por sus novelas románticas subidas de tono. Las obras de Jean son extremadamente populares gracias a su contenido explícito, lo que le permite vivir una vida cómoda en Los Ángeles. A medida que la carrera de escritora de Jean se dispara, se siente insatisfecha y comienza a desconectarse de su mundana vida como mujer casada. Comienza a canalizar las aventuras de su heroína en las suyas propias, para consternación de su marido, Mark. Mark, interpretado por Tony Franciosa, es un guionista que lucha por abrirse camino en la industria y se siente emasculado por la creciente independencia de Jean y su desprecio por los valores matrimoniales tradicionales. En un intento desesperado por reavivar algo de emoción en su vida, Jean decide incluirse a sí misma en su novela, creando un personaje llamado 'Babette', una mujer joven, seductora y despreocupada que vive según sus propias reglas. A medida que Jean encarna el espíritu de Babette, comienza a vivir las aventuras de su personaje en el glamuroso mundo de Los Ángeles de los años 60. La transformación de Jean en Babette comienza a afectar su vida. Su matrimonio con Mark comienza a desmoronarse, ya que él ya no puede controlar ni conectar con la versión reformada de su esposa. Mark se siente cada vez más celoso y resentido, temiendo que Jean lo haya abandonado por la libertad y la emoción de su personaje de Babette. A medida que Jean se sumerge más en su alter ego de Babette, comienza a atraer el tipo de atención equivocado. Su comportamiento coqueto en público genera rumores de infidelidad, lo que provoca chismes y especulaciones entre sus amigos y conocidos. Mark, tratando de poner fin al caos, confronta a Jean sobre su comportamiento, acusándola de ser imprudente e irresponsable. Jean intenta reavivar su amor por Mark, pero la comunicación de la pareja se rompe aún más debido a la continua fascinación de Jean por Babette. Dividida entre su amor por su marido y su deseo de libertad, Jean se ve atrapada en una complicada red de emociones y engaños. A medida que la historia se desarrolla, Jean debe afrontar las consecuencias de sus actos y enfrentarse a la realidad de su matrimonio. La tensión entre Jean y Mark llega a un punto álgido durante una cena, en la que las payasadas de Jean causan caos y vergüenza delante de sus amigos. La cena sirve de catalizador para que Jean se dé cuenta del impacto de sus actos en quienes la rodean. En un intento final de reconciliarse con Mark, Jean vuelve a su vida normal, abandonando su personaje de Babette. Sin embargo, las experiencias de Jean la han dejado con una nueva apreciación por su independencia y una nueva perspectiva sobre su matrimonio. Mark, reconociendo los fallos en su propio comportamiento, intenta reconectar con Jean en sus propios términos. La Alegre Casada termina finalmente con Jean reflexionando sobre las lecciones que ha aprendido. Comprende que su fascinación por Babette era una forma de hacer frente al vacío y la desilusión que sentía en su vida. La película concluye con Jean eligiendo reconciliarse con Mark, no volviendo a ser como antes, sino abrazando su nueva independencia y comprendiendo el valor de su matrimonio. La Alegre Casada fue un éxito moderado de taquilla, elogiada por su ingenioso guion y las interpretaciones de sus actores principales. La película también marcó una desviación significativa de la comedia romántica tradicional de la época, ya que abordó temas como el matrimonio, el feminismo y la libertad personal de una manera refrescantemente abierta y honesta. Como comentario satírico sobre las normas sociales de la década de 1960, La Alegre Casada sigue siendo una película estimulante y entretenida que continúa resonando entre el público de hoy.