Krull

En los confines lejanos de la galaxia, se encuentra oculto el pacífico planeta Krull, hogar de un reino en paz bajo el gobierno del Príncipe Colwyn (Ken Marshall). Mientras se encuentra al frente de una celebración tradicional que marca la unión entre él y su amada Lyssa, la tragedia golpea. Inadvertida e insospechada, una fuerza alienígena desciende sobre la tierra, con sus intenciones claras: capturar a Lyssa y convertirla en un premio en sus juegos intergalácticos. Estos invasores extraterrestres, conocidos como los Slayers (Asesinos), son poderosos y despiadados en su búsqueda del poder. Con sus imponentes naves flotando sobre la tierra y una legión de guerreros a su disposición, hay poco que se interponga en su camino. Pero Colwyn está decidido a rescatar a su amor y reclamar su legítimo lugar como gobernante de Krull. Buscando el consejo de un sabio anciano llamado Ynor (Roberts Blossom), Colwyn se entera de la vulnerabilidad de los Slayers al Glaive mágico de Wormxul. Creyendo que este antiguo artefacto puede ser la clave para derrotar a los invasores, Colwyn emprende un peligroso viaje a la fortaleza del pueblo de Ynor, una hermandad de compañeros, para reunir a un grupo de valientes guerreros dispuestos a unirse a él en su búsqueda. Junto a Kegan (Freddie Jones), el herrero hosco pero adorable; Orlik (David Buck), un hábil rastreador; y Ralon (Tim Moxon), un astuto ladrón, esta banda heterogénea de héroes parte a través del implacable terreno de Krull. En el camino, se encuentran con un personaje misterioso y enigmático conocido como el Mago, quien comparte con ellos una extraña comprensión del funcionamiento del universo. A lo largo de su odisea, los compañeros enfrentan numerosos peligros mientras navegan por traicioneros pasos de montaña, desiertos abrasadores y bosques oscuros. En el camino, se encuentran con una tribu de guerreros nómadas que, habiendo sido vencidos una vez por los Slayers, ahora buscan vengar a sus antepasados. Se produce una feroz batalla, que deja a sus participantes cambiados para siempre. Al llegar a la fortaleza del pueblo de Ynor, los compañeros aprenden la verdad sobre el Glaive de Wormxul y su misión se vuelve más clara: alcanzar el corazón de la fortaleza de los Slayers, reclamar el artefacto y romper el control del alienígena sobre Lyssa. Sin embargo, los compañeros pronto descubren que no son los únicos con conocimiento de la antigua reliquia. El astuto líder de los Slayers, el Hechicero, ha estado rastreando cada movimiento de Colwyn y está listo para atacar. Cuando nuestros héroes se acercan a la fortaleza, se preparan para su confrontación final con los Slayers. Empleando astucia y valentía, los compañeros navegan por los laberínticos pasajes y las traicioneras trampas diseñadas para impedir su progreso. En el corazón de la fortaleza se encuentra la ciudadela central donde Lyssa está cautiva, custodiada por los guerreros de élite de los Slayers. En un enfrentamiento épico, Colwyn y sus compañeros se enfrentan al Hechicero en una feroz batalla, con el destino de Krull pendiendo precariamente de un hilo. Utilizando la fuerza combinada de sus habilidades únicas y el antiguo poder del Glaive, finalmente pueden vencer a los invasores y romper su control sobre la tierra. La fortaleza se derrumba, liberando a Lyssa y destrozando el poder de los Slayers sobre el reino de Krull. Tras su triunfo, Colwyn y Lyssa se reencuentran, fortalecidos por su arduo viaje juntos y unidos por el amor inquebrantable que comparten. Y aunque su pueblo ha conocido una muestra de libertad, quedan marcados para siempre por su roce con los poderes intergalácticos de los Slayers. Así, comienza una nueva era de paz y cooperación, con el pueblo de Colwyn permanentemente vigilante contra las sombras de la galaxia que amenazan su hogar.